COMENTARIO DEL LIBRO "JUBENTUD ENEXTASIS" La verdad este libro me sorprendio porque desde hace un tiempo que me lo habian prestado pero no me habia dado el tiempo para leerlo y cuando usted dijo que lelleramos uno a nuestro gusto pense en leer ese y le puedo decir que de lo unico que me arrepiento es de no haberlo leido antes, me gusto muchisimo porque habla de muchas cosas muy interesantes relacionadas con nosotros los jovenes, habla mucho de de los valores del noviasgo y de lo que nos puede pasar si tenemos sexo prematrimonial porque toda la gente dice "no pasa nada es normal" pero la verdad si pasa y hay confirme y reafirme mas mis ideas sobre el sexo prematrimonial y pienso que es mejor esperar porque todo tiene su tiempo y es mejor esperar a sufrir las consecuencias.
Aventura de Amor H ace un par de días que termine mi relación con Emiliano, una relación que duro mas de tres anos, el era un joven serio, pasivo y muy inteligente pero no era el tipo de hombre que yo quería para mi pero no podía terminar mi relación con el porque mi padre no lo aceptaría. Emiliano era abogado economista y director de la empresa de papa. Una noche mientras cenábamos se lo confesé a papa. Llevaba tres anos paliándome con la realidad y me negaba a admitirla. Cuando Sofía mi hermana, que era doctora y novia de Alejandro Montesinos, me contaba sus relaciones intimas con él y me sentía muy mal. Esa noche decidí dos cosas importantes en mi vida: hacer un viaje por el mar, por todo el mediterráneo y romper mi relación con Emiliano. Cuando se lo dije a el, con su cara de pasmado se quedo mirándome sin decir nada. Pero al menos, por mi parte, ya quedaba aclarada la situación y sin dudas. Cuando papa me oyó, me miro espantado. No podía creer lo que escuchaba. -¡Mariana!- me dijo- ¿Cómo es posible que después de tres anos termines tu relación con Emiliano? –Hay cosas que no se pueden aguantar, papa. Soy joven aun, trabajo contigo y solo por el hecho de que Emiliano se el abogado, economista y director de tu empresa no puedo empeñar mi vida. Papa conocía mi serenidad por eso me tomo de la mano, me llevo hasta la biblioteca que era un lugar muy grande y acogedor, donde podríamos hablar sin interrupción. Nos sentamos en el sillón que esta junto a la ventana y ahí me pregunto ¿porque lo dejaste? Emiliano es un hombre que representa mucho en nuestra empresa y tu no lo dejaste sin tener una razón valida, ¡verdad! Tuve que confesarle los pormenores de su falta de interés que Emiliano tenia en todo, hasta para darme un beso. Y añadí:
Y ahora que ya lo sabes quisiera realizar un viaje por el mediterráneo en barco para aclarar y ordenar mis ideas. Papa que siempre fue razonador me dilo con cierta pena: lo siento Mariana, lo siento muchísimo no pensé que las cosas estuvieran tan mal entre ustedes, y yo mismo te traeré el pasaje para que hagas ese viaje. Me fui a mi cuarto y me tire en la cama. Llore toda la noche pensando en que habían pasado tres anos de mi vida desperdiciados… pero no tenía más remedio que tomar aquella decisión. Por mis amigas sabia de sus relación emocionales y sexuales… Sofía mi hermana me contaba lo suyo. Aquel fin de semana, ella y su novio Alejandro se habían ido a Escocia. Alejandro, que era el jefe de las oficinas de papa, arquitecto de profesión iba a ver unos terrenos donde querían levantar una fraccionamiento cuyo proyecto yo tenia en mente. Era la encargada de elaborarlo y pesaba hacer algo bonito. Pero al margen de todo esto quería hacer un viaje. Empecé a preparar mi equipaje y al anochecer embarque, papa me llevo asta el lugar donde estaba el barco para así comenzar mi viaje, era un barco muy grande y lujoso había mucha gente esperando para abordar. Ahí me despedí de papa y me dijo que me hacharía mucho de menos. Iba por el pasillo y el bolso me tropezó en una de sus ranuras. Alguien venia de tras de mi y lo tomo por el aire. Me volteé para tomarlo y me sorprendí al ver un hombre joven, rubio de ojos verdes, atractivo de verdad. Vestía uniforme blanco y me dijo –no se preocupo, señorita- la acompañare hasta arriba. Me llamo Santiago. -Soy Mariana Montero- que nombre tan bonito. Llegamos a cubierta y un marinero intento tomar el bolso, poro el le dijo: - yo la acompañare hasta su habitación. Me pidió el pasaje y yo se lo di. -preferencia… vaya, vaya. Y tomándome del brazo con naturalidad. Me llevo por cubierta, y después me acompaño hasta mi habitación -Vendré mas tarde para saber como se encuentra, Mariana, si está a gusto… Lo mire algo asombrada y el debió entender mi mirada porque dijo –Soy el encargado de relaciones publicas del barco. No se preocupe. Me quede sorprendida, estaba acostumbrada a ver suites de hoteles, pero nunca
había visto una en un barco. Papa era exagerado me había comprado lo mejor. Había una salita pequeña pero muy bonita era un lugar muy acogedor, en la recamara había un vestidor y un baño grande con una tina, en el cuarto había una ventana donde se podía ver hacia el mar, la recamara era muy grande y cómoda, era de verdad la mejor de las suites. Fernando me miro con curiosidad y me dijo verdad que es muy bonita la habitación. –Le dije- nunca había visto algo similar. Me entrego el bolso de viaje y se fue pero enseguida se volteo y me dijo- saldremos dentro de pronto. El barco navega de noche. Pronto llegaremos a palma. Si le apetece salir a dar un paseo, a comer o a conocer palma, la acompañare con mucho gusto - gracias- le dije Pero ni acepté ni rechace su invitación. Para mi era un desconocido. Esa noche dormí muy mal, no estaba acostumbrada a navegar. Antes de dormir recorrí todo el barco tenia varias piscinas, salas de fiestas, restaurantes y varios comedores, con gente muy elegante aunque por mi profesión de arquitecta no me asombraba pues estaba acostumbrada a ver todo ese tipo de lujos, trabajaba en los estudios de papa y ahí veía a mucha gente acostumbrada a poseer esos lujos. Por mi parte no me podía quejar teníamos una casa preciosa en Barcelona y Madrid teníamos oficinas en las mismas ciudades, pues trabajábamos toda la zona y mucho mas, papa se había convertido en un arquitecto muy importante y a mi me gustaba la profesión, pero necesitaba desconectarme de todo y por eso emprendí mi viaje. Cuando me levante por la mañana, luego de darme una ducha me puse un vestido rojo, usaba unas zapatillas negras de tacón muy alto y unas joyas muy hermosas que me regalo papa. Salí a cubierta, el barco ya estaba amarrado al muelle y los viajeros se disponían a conocer la ciudad. Un camarero me dijo- zarparemos hasta el anochecer, disfrute su recorrido señorita- -si ya lo sabe todo- dijo una voz tras de mi-, solo me queda invitarla a conocer palma, si es que aun no la conoce. Me volteé y era Fernando. Llevaba pantalón gris, camisa color durazno, estaba realmente atractivo. No pensaba perderme aquella ocasión –acepto- le dije, aunque conocía palma casi de memoria, y salimos juntos.- ¿siempre trabajas en barcos? No siempre contesto, este es un barco nuevo y me contrataron para asegurarme del buen funcionamiento dentro de el. ¿Eres casada? Me pregunto desconcertándome. No, soy soltera y sin compromiso Vaya tengo suerte… -¿Por qué lo dices? -por que también soy soltero y sin compromisos, lo raro es que siendo tan bella no tengas novio. Lo mire un poco maliciosa me atraía mucho, todo lo que nunca me inspiro Emiliano. Sentí miedo, pues no lo conocía y empezaba a sentir algo por el. Papa se molestaría cuando se lo contara, yo no tenia madre desde hacia mucho tiempo pues ella falleció cuando todavía era una niña pero tenia un padre que hacia la doble función y muy bien por cierto, se había encargado de no nos faltara nada, estudiamos en los mejores colegios y siempre estuvo al pendiente de nosotros. A el solía contarle todos mis problemas, lo de Emiliano se lo dije cuando no podía mas. -te has quedado pensativa- dijo Fernando y agrego te invito a tomar un café en un lugar que esta muy cerca de aquí, en ese lugar venden los mejores cafés de la ciudad y unos pastelillos realmente deliciosos. -esta bien – le dije y nos dirigimos hasta el lugar. Ya estando ahí nos sentamos en un lugar cerca de una ventana donde se alcanzaba a ver el parque que estaba junto a la catedral. -eres una chica “bien”, ¿verdad? No se a lo que tu llames “bien”. -bueno para hacer este viaje en una suite de esa clase, no eres cualquier cosa
Cualquier cosa no soy, pero tampoco soy una niña “bien”, como tú dices, soy una arquitecta profesional. Eres muy joven para ser arquitecta, pues no aparentas más de 21. -te equivocas, tengo 25. Acabe la carrera a los 23 y pase dos anos más en los Estados Unidos. -ósea que sabes perfectamente el ingles. -por supuesto. A eso fui a los Estados Unidos, a perfeccionar mi carrera y a estudiar el idioma. Cuando nos servían el café, me dijo- me gustaría ser tu amigo, y si me lo permites te acompañare todo el viaje-¿acompañarme? ¿De que manera? -bueno, todos los días pararemos en una ciudad y si quieres te digo el próximo itinerario, así podrás planificar todo. -no, mejor no me lo digas, pues me gustan las sorpresas. Al salir del café fuimos a recorrer el lugar, paseamos por el parque y visitamos la catedral. Después fuimos a comprar un par de cosas que me hacían falta. Por la noche regresamos al barco y me acompaño hasta mi suite, y quedamos de vernos un poco mas tarde en cubierta. Luego de un rato llamaron a la puerta, debe de ser Fernando, pensé y rápido fui a abrir. Ya vestía un uniforme blanco con gorra blanca y azul. – ¿Siempre haces ese trabajo? Le pregunte con curiosidad. -no, no suelo hacerlo. Este viaje es pura casualidad porque el barco es nuevo y los dueños me pidieron que vigilara como se trata al pasajero. Eres empleado de la compañía… -Algo así. Me llaman cuando me necesitan y yo acudo. Ya era muy tarde y le pedí que me acompañara hasta mi suite. Esa noche dormí pensando en Fernando, pero habíamos quedado de ir a cenar a la mesa del capitán la noche siguiente, era una invitación que se le hacia a pocos pasajeros. A la noche siguiente yo vestía un traje negro escotado y sin mangas. Hacia mucho calor y eso que la brisa del mar la contrarrestaba un poco. Fernando me esperaba en la puerta de la suite. El vestía un traje negro y camisa azul, lucia muy bien, pues se veía muy atractivo. Fernando me estaba causando una serie de emociones que me confundían todavía más, pues tenía miedo y a la vez ansiedad. Había tenido una relación blanca con Emiliano. Sus besos era simples, y no podía hablar de caricias masculinas, porque no las había tenido, Emiliano era tan tímido y respetuoso, que me trataba como si yo fuera una estatua y era una mujer con nervios, deseos, emociones y ansiedades, como cualquier ser humano. Fernando tenia algo que me atraía de un modo alarmante, incluso quise decir que no iría a cenar con el, que invitara a cualquier otra persona a la mesa del capitán, pero me fue imposible, no tuve el valor. Me sujeto del brazo y me llevo hasta el comedor donde me presento al personal. Todos fueron muy amables y Fernando mas que nadie. Empezaba a tener con el una complicidad extraña que me atraía y me daba miedo ala vez. Luego de un rato comenzó la orquesta y me invito a bailar, y acepte un poco nerviosa. Me sujetó por la cintura, me apretó contra su cuerpo y bailo un bolero despacio de una manera muy sensual. “estoy perdida”, pensé. “me estoy enamorando de este hombre y no se quien es. Papa me mataría cuando lo sepa” que Emiliano no fuera mi hombre no significa que otro tampoco lo fuera. Baile pegado a el. No se cuanto cerré los ojo y Fernando me dijo una palabras bellas al oído. Me di cuenta de que me estaba conquistando y cuando me llevo al camarote, ya casi amaneciendo, me miro bajo la lámpara que iluminaba mi puerta. – si me dejas te daré un beso -!por favor Fernando! -por favor Mariana… Y doblándome por la cintura me busco la boca. Me beso un buen rato. Jamás había sentido una cosa semejante, las mariposas empezaban a recorrer mi cuerpo y pensé en Emiliano. Tantas veces que pudo besarme así y nunca lo hizo.
-Perdóname- dijo el después -. No pude evitarlo. No pude decir palabras, agite la mano y entre a mi camarote. Me fui al baño, me desvestí y me di una ducha. Luego me puse el camisón, termine llorando aunque no se porque lo hacia, y apreté mi boca contra la almohada y así me dormí. Por la mañana, al despertar me invadían los recuerdos de aquel dulce beso, pues no podía dejar de pensar en lo sucedido la noche anterior. Salí de la cama para vestirme, me puse un lindo short y una blusa blanca, me sujete el cabello y así salí de mi camarote. Lo encontré enseguida y al verme me dijo – hoy visitaremos Florencia, pasaremos un día maravilloso, si tu me permites te mostrare algunos lugares de interés. ¿Me acompañas? --¡Esta bien! Le conteste enseguida. Al llegar al muelle me dijo – alquile un automóvil para hacer nuestro recorrido del día de hoy. Subí con el al auto, era un coche muy bonito para ser de un empleado pues el alquiler debió de costarle mucho dinero. ¿Puedes salir así, sin avisar a nadie o pedir algún permiso? –le pregunte- -porque no soy un empleado de tierra. Puedo hacer lo que quiera. Solo estoy de inspección. Vamos que se nos hace tarde, mejor cuéntame algo de ti. - No tengo nada que contar. ¿Y tú que me cuentas de tu vida? -La mía es simple. Soy ingeniero naval y abogado. Y pase un largo tiempo en los Estados Unidos. O sea, que era un tipo pudiente, o al menos lo era su familia. Pensé que le agradaría a papa pero solo dije –tuve un novio durante tres anos. El es abogado y economista – y no dije nada mas porque tendría que explicar quien era yo y no quería. -¿terminaron o sigues con el? - Lo deje. Por eso decidí hacer este viaje, para compensar mi pena y aclarar mis ideas. -vaya, vaya ¿y lo amabas mucho? Lo preguntaba con un tono íntimo y malicioso e insinuante. No respondí. Llegamos a Florencia y nos dirigimos a un restaurante para desayunar hay seguimos nuestra conversación. -¿Por qué duraste tanto con el si no lo amabas? -No lo se. Tal vez no quería reconocerlo. Mejor háblame de ti. -jamás he tenido una novia formal. Después de desayunar fuimos a varios lugares la ciudad era hermosa si de por mi fuera me hubiera quedado toda la semana en ese lugar. A media tarde fuimos a llevar el automóvil en el muelle y entramos al barco y no supe quien se haría cargo del auto. Aquella noche no quise ir a cenar al lujoso restaurante. Me quede en cubierta sola, pues prefería pensar. Mas tarde subí a mi habitación para descansar y dormir un poco. A la día siguiente estaríamos en Nápoles, pero no quería salir ese día solo quería pensar y preferiría pasar el día en el barco. De pronto sonó el teléfono, era el, le dije que estaba cansada y que prefería quedarme a descansar -Me gusta mi relación contigo, me gusta mucho- me dijo Va a ser muy difícil olvidarte, ¿sabes? Gracias. Colgué el teléfono y me acosté. Fernando para mi ya no era cualquier, era una persona que me atraía bastante, de un modo casi brutal, por eso soñé con el, y cuando desperté por la mañana, me vestí rápidamente y me baje del barco para que el no pudiera verme. Recorrí Nápoles yo sola, con cierta nostalgia, Ir sola no me complacía pero así pude pensar mejor y visitar algunos museos. Al atardecer entre al barco, lo primero que vi fue a Fernando.
-Vaya - me dijo -¿Por qué huiste? - Claro que no hui- le conteste enseguida -No lo niegues, no esta bien en ti. Considero que eres una persona educada y, sobre todo, segura de ti misma. ¿Qué temes Mariana? -Nada, Fernando, estas equivocado. -¿Aceptas una cerveza en el bar? -Esta bien pero solo una, de acuerdo. - Claro será como tú digas. Nos sentamos en una mesa mirando hacia el mar y ya empezaba a anochecer. -Me gustaría que esta noche bailáramos juntos. -No. prefiero bañarme, hace mucho calor y me quedare en la piscina. -De acuerdo, estaré a tu lado. -Pero Fernando…. -Por favor Mariana… contéstame algo ¿amaste a ese novio con pasión? -No. Pensé que estaba enamorada de Emiliano, pero poco a poco fui entendiendo que no era mi hombre. - ¿Y como tiene que ser tu hombre? -Fiel, atractivo, cariñoso, comprensivo y apasionado entre algunas otras cosas más, y lo más importante que no tenga más mujer que yo. -Que curioso, coincidimos en todo, yo busco eso, una mujer leal, apasionada que me ame con toda la pasión y emoción que implica el amor. Me sentí aturdida y desvié mis ojos de aquellos verdes tan llamativos. Yo también los tenía verdes. Era esbelta, de piernas largas y cintura breve, caderas grandes y cabello largo. Papa siempre me decía que era muy atractiva. Papa nunca me dejaba salir con Emiliano un día entero, en cambio a Sofía, mi hermana, la dejaba salir los fines de semana con Alejandro y papa no se preocupaba. Cuando hacia el comentario con mi hermana, Sofía solía decirme: -Papa sabe que no estas enamorada. En cambio conoce perfectamente mi amor por Alejandro. Papa era muy escrupuloso conmigo y libre con Sofía…Esta pensando casarse a finales de ano y me contaba todo lo que hacia con su novio, todo lo que yo nunca hice con Emiliano…. A cualquiera que le dijera que a mis veinticinco anos era virgen se hubiera reído de mi y por eso no se lo dije a Fernando. -Es raro que no tengas novia- le dije aquel día ya cerca de la piscina- -¿Por qué lo dices? -Porque eres un hombre muy especial. Tienes un ego que puede enamorar… -¿Te enamoraría? -No lo se, prefiero no pensarlo. -Pues me gustas de tal manera, que pienso en ti constantemente cuando no estoy a tu lado. Le conteste. Me tire a la piscina y nade de lado a lado. Vi como se tiraba Fernando. A grandes brazadas vino junto a mí. Me escurrí hacia la escalera y nos sentamos en cubierta y el me pregunto -¿Por qué dejaste a Emiliano? Ya hablaba de Emiliano como si lo conociera de toda la vida… Esa noche yo necesitaba desahogarme un poco. Mi amistad con Fernando era ya un hecho. Me había enamorado de el, y como mujer con el sexto sentido que tenemos todas, yo sabia que Fernando se había enamorado de mi. ¿Adonde llegaría aquella relación? ¡Yo que sabía! Pero nunca olvidaría aquel crucero. Íbamos directos a Cerdeña y después regresaríamos a Barcelona sin detenernos. Se terminaba el viaje, la relación y posiblemente aquella hermosa amistas. Por eso, cuando aquella noche, bajo la luna y un
poco mas lejos de la luz que iluminaba la puerta de mi camarote, me pregunto porque había dejado a Emiliano, se lo dije: -Emiliano es el mejor ayudante de mi padre, para este hubiese sido perfecto que me casara con el. -¿y tu madre que opina? -mama falleció hace mucho tiempo, apenas la recuerdo pero mi padre, afortunadamente, no volvió a casarse. Tengo una hermana que es medica y se casara pronto con el gerente de la empresa de mi padre, que es también arquitecto, como yo, empecé con Emiliano hace unos anos, el primer ano fue un juego de niños, de jovencitos, íbamos a bailas teníamos muchos amigos y solíamos salir con ellos y no me di cuente de que no era amor, era amistad. -¿y cuando te percataste de que no era amor lo que sentías por el? -no lo se. Empecé a pensarlo un día al escuchar las relaciones de mis amigas y de Sofía mi hermana, y supe que lo mío no era lo que ellas me contaban. -o sea, que era un hombre pasivo, totalmente culto, respetuoso pero no había pación en nuestra relación. -no te emociono. -no, por eso un día leí un folleto de estos cruceros y decidí embarcar, pero antes hable con mi padre y le conté todo. Emiliano, como te dije, es muy amable, inteligente, pero la mujer para el no existe… es un hombre apagado. - ya entiendo, tu necesitas fuerza, amor, pasión… ¿no es eso? -si. No todos lo hombre sirven para todas la mujeres. Estoy seguro de que Emiliano encontrara a una mujer a quien hacer feliz, pero no a mí. Y eso es todo no hubo nada mas. -¿y como acepto tu rompimiento? -no dijo nada, como siempre. Emiliano suele aceptar todo con pasividad. -me asombras. -¿Por qué? -por que eres una mujer palpitante, viva, necesitas que te amen. Tu posesión es un regalo… ¿pasarías esta noche con migo, mariana? -claro que no ¿Escrúpulos? Yo te deseo y tu a mi ¿Por qué no pasar la noche juntos? ¿Por qué no darnos ese gusto? -no -de acuerdo, de acuerdo, no insistiré. Nunca lo hago un una mujer; sino quieres, lo dejamos y tan amigos. -es raro que te conformes -si, es raro, pero a ti te respeto de un modo especial. Y no se porque. Te conocí de una manera curiosa y original. Continúe contigo, te lleve a tierra y regrese abordo a tu lado. Pero si me dices que no, pues se acabo el asunto, no por eso voy a dejar de admirarte y desearte. Se levantaba -buenas noches mariana. -buenas noches. Entre en mi camarote y quede pegada a la puerta pensando si había hecho bien o mal. Pensé que había hecho bien. A la mañana siguiente, cuando Salí, lo encontré junto al barandal del barco. -estoy dispuesto a recorrer Cerdeña con tigo por que el viaje se acabo. Al regreso no iremos directo a Barcelona. La pasamos todo el día juntos, recorrimos museos y algunas tiendas, por la tarde comimos un helado y nos sentamos en una banda que estaba en un jardín rodeada con flores, en todo
el camino no me hablo de amor, me fue contando lo que veía. Yo ya conocía serena pero no dije nada. Al atardecer, regresamos al barco. -esta noche- me dijo antes de despedirse- te invito e cenar en el comedor. Bailaremos un rato. ¿Te apetece? Claro que si. -le dije-. tenia varios vestidos de fiesta, pero aquel negro escotado y abierto por detrás, apretado hasta la cintura y con vuelo hasta el suelo, me quedaba muy bien, puse en mis pies unos guaraches plateados y después de maquillarme un poco, Salí del camarote, allí estaba Fernando esperándome, con un traje muy elegante. -¿sabes? – me dijo-. Tu boca invita al beso, mariana. -¿Qué? -lo que he dicho. No te boy a negar que conozco bien a las mujeres y tu eres de esas que no se olvidan. Conmovida y ruborizada, me dirigí con el al comedor. La orquesta ya tocaba. El me llevo a cenar a la mesa del capitán, ya los conocía a todos. Después de servir el postre me invito a bailar y yo acepte. Fernando me hablaba al oído me decía cualquier cosa, pero su boca cerca de mi oreja me estremecía. Estábamos emocionados. Bailamos hasta muy tarde, cuando nos íbamos a retirar Fernando me llevo de la mano hasta el camarote y allí se detuvo. Me tomo con sus manos envolviéndolas en mi cintura y me beso con suavidad la mejilla que se ruborizaba al compas de su boca, después me beso en la boca y le correspondí con un beso muy calido y mis manos alrededor de su cuello. Nos besamos por un largo tiempo sus manos recorrían todo mi cuerpo y entramos a la habitación, ya no pude negarme, nos deseábamos, y poco a poco le fui desabrochando cada uno de los botones de su camisa con mis suaves manos, al mismo tiempo desvaneció el vestido de mi cuerpo, nos recostamos sobre la cama, nos besamos y acariciamos, éramos uno mismo en ese momento, nada mas importaba, solo nuestro amor. Me dijo lo mucho que me amaba y lo mucho que le gustaba desde que me vio entrar por primera vez al barco. Me dormía cuando amanecía. Al despertar, pensé que había sonado. Pues el no estaba con migo y el barco ya estaba en Barcelona. “!dios mío!”, pensé. “mi padre vendrá a buscarme. Estará en el muelle y yo tendré que bajar con Fernando”. Pero me equivoque, Fernando no estaba por ninguna parte. -¡dios santo, se había ido así, sin decirme ni una palabra! ¿Cómo era posible? Yo tenia de el un concepto elevado y me había dejado después de haberme poseído. Me sentía muy mal. Salí de la cama y me vestí para ir con mi padre que ya me esperaba. Cuando vi a mi padre, baje corriendo y llore en si pecho. Papa me dijo.- ¿Qué ocurre? ¿Qué te han hecho? -solo es la emoción de mirarte. Papa no respondió, me ayudo a meter el equipaje en el automóvil y arranco. En el camino me dijo -no se llora por nada, mariana, tu llanto indica un dolor grande o una decepción, no soy tonto. -te digo que no, papa. -ya me lo contaras estoy seguro de que lo aras. Mi dolor era doble, por lo feliz que había sido y por la manera que había dejado. Fernando me había abandonado como si yo fuera un saco y yo era un ser humano. Sofía me recibió con los brazos abiertos y enseguida me dijo: -algo te a ocurrido. Me acompaño a la habitación iba ablándame de los terrenos que había comprado nuestro padre. -es un terreno maravilloso. A Alejandro le encanto y papa ya hiso el contrato. -me pondré a trabajar – dije-.
Pero mi vos temblaba. Sofía me empujo asía la alcoba y me tiro al sofá, me miro bien a los ojos y alzándome el rostro con las dos manos me dijo -¿Qué te paso? Papa me conto lo de Emiliano. Eso no me asombra, lo que me llama la atención es tu semblante. -conocí a un hombre. -¿lo vez? Y te ha enamorado. Estabas tan falta de amor - no es eso, Sofía, no es eso. -¿entonces que es? -ayer me acosté con el. -¿y bueno? -que no lo encontré por la mañana. Subí al auto con papa y no lo vi más. -ya lo veras, no concibo que un hombre se haya acostado con tigo, te haya conocido y te haya dejado por las buenas no te preocupes ya veras que aparece. -no se lo cuentes a Alejandro por favor me da vergüenza. -eso no tiene que dar vergüenza es la vida misma y no hay nada de que avergonzarte. Tal vez Sofía tenía razón pero yo no razonaba. Solo tenia en mi corazón que había sido burlada, había sido convencida para fallar y no estaba dispuesta a perdonar. Venia cansada me di una ducha y me acosté. -ya veras que vuelve me dijo Sofía y me pregunto si lo conocía de antes -no lo conocí en el barco. Era sencillo pero tenía clase un joven especial. -ya aparecerá- Dormí sonando con el. Así viví una semana incluso empecé el proyecto de la organización. Una tarde tuve una llamada extraña. Era una compañera de colegio, pilar, pero no recordaba el apellido. Pilar había sido mi compañera en un colegio ingles. Me dijo que le gustaría verme, mi asombro fue mayor, por que no se encontraba entre las amigas de mi grupo, pero no podía despreciar a una persona que había conocido antes y quería verme. -¿nos vemos en una cafetería? Me dijo pilar -claro, pero… ¿ocurrió algo importante? -no. Solo quiero hablar contigo. Te llame hace unos días y Sofía me dijo que estabas viajando por el mediterráneo y quiero que me cuentes tus experiencias por que me gustaría ir a uno de esos viajes. Quede citada con ella al día siguiente. En eso, papa asomo por la puesta de mi despacho y me mostro una tarjeta. Era una invitación de cumpleaños de una amiga mía. -es de pilar. -si. Y al mismo tiempo me confeso que sus padres era personas muy importantes y de mucho dinero. Son dueños de una compañía de cruceros muy importante. -¿será de esa compañía el barco donde fui de viaje? -si. Nuestra empresa ha construido algunas casas para ellos. -Allí vive gente muy importante, como mínimo tienen doce barcos y celebran el cumpleaños de su hija Pilar con una gran fiesta. -Pues me quede de ver con ella mañana en un café, dijo que quería hablar conmigo. -Me parece bien, nos invito a todos a su fiesta pero te contare después con más detalles hija porque tengo que salir en este momento a ver lo de un terreno. Al día siguiente fui a buscar a Pilar al lugar donde quedamos de vernos era un café muy grande y bonito, al entrar la reconocí inmediatamente, pues no es fácil olvidar a una persona tan inteligente, recuerdo que siempre estaba entre los primeros lugares.
Rápidamente se levanto de su lugar y se acerco para saludarme. -Hola Mariana te acuerdas de mí - claro te reconocí desde que entre, pero dime como has estado -Muy bien, hace un tiempo que me case y soy la mujer mas feliz del mundo, tengo un marido único. Pero dime tu que as hecho, me entere que andabas con Emiliano, ¿te casaste con el? - No, terminamos hace algunos días, por eso realice mi viaje para despejarme un poco. - Que bueno que lo mencionas cuéntame de tu viaje. -No hay mucho que contar solo fueron unos días. Después de platicar un rato sobre cosas sin importancia nos despedimos. De regreso a casa pensé quienes eran sus padres, papa había dicho que tenían una compañía de barcos y no entendía porque Pilar me pedía consejos para realizar ella un viaje siendo que esa información ella la sabía de sobra. Cuando estábamos en el café Pilar menciono que tenia un hermano ingeniero como ella y no se porque pero eso me inquieto un poco. Ya en casa Sofía se acerco y me abrazo porque me veía triste y me dijo-Mariana lo que paso en el barco no tiene importancia, no tienes porque sentirte tan mal. -Tal vez para ti no tenga importancia pero para mi si, fue mi primera vez y no tengo experiencia, todo lo aprendí esa noche con el fu lo mejor que me ha pasado pero lo que me tiene tan mal es que el se fue y me dejo sin haber dicho nada eso es lo que mas me duele y me confunde, me siento como un trapo usado ¿y sabes que es lo peor? ¿Qué? -Que me enamore profundamente de el y el ya no esta. -¿y que hacia el en el barco? -el era el encargado de relaciones publicas de la compañía. -mariana, papa no te permitiría que te casas con un don nadie -no era un don nadie, Sofía, es curioso pero el actuaba como un verdadero señor de clase y no como un don nadie como tu dices. -pero se acostó contigo y huyó y eso no es de un caballero. -tal vez es un castigo por lo que le hice a Emiliano - a Emiliano no le afecta mucho, lo he visto con la secretaria de papa dos o tres veces En esa tarde papa entro a mi despacho, me dijo que Sofía le había comentado de lo sucedido con Fernando en el barco y también le hablo de su empleo en este mismo. A papa no le parecía que yo estuviera interesada en un joven de otro nivel social. Fueron pasando los días y la fiesta se acercaba. Un día fui a ver los terrenos que había comprado papa para empezar a trabar en mi proyecto, me sentía muy triste porque para mi no importaba que Fernando fuera un simple empleado, yo lo amaba. Ese día en la noche era la fiesta de Pilar y no tenia ánimos de asistir. Al llegar al lugar donde iba atrabajar vi un carro estacionado, era muy lujoso de los más caros que podría haber, pero no le tome mucha importancia. AL bajarme de mi coche vi que alguien se acercaba asía mi, era Fernando, me quede sin aliento pues no esperaba encontrarlo en ese lugar. -Hola Mariana.- me dijo. -¿Qué haces tu aquí? -Sabía que te encontraría por aquí. - ¿Cómo lo supiste? - ese es mi secreto tengo algunos contactos. -¿Por qué te fuiste sin decir nada? -No quise ofenderte o hacerte sentir mal, por eso me fui antes de que despertaras pero quiero que sepas que te amo y llevo grabado en mi mente
tu recuerdo. Mariana quiero que sepas que eres el tipo de mujer que había estado buscando y ahora que te encontré no quiero perderte quiero pasar el resto de mi vida contigo. No supe que decir me di cuenta de que el no me había usado como yo pensaba, me sentía tan confundida pero dentro de mi tenia una tranquilidad al escuchar sus palabras, yo también lo amaba. -Sube a mi auto y te llevare a que conozcas un lugar que se que te encantara. -No puedo tengo una compromiso para mas tarde y no quiero que se me haga tarde. -Por favor, no nos tardaremos mucho. -No Fernando no creo que sea correcto. -Mariana yo te amo. Créeme que si te deje fue porque pensé que seria lo mejor en ese momento pero te buscaría después y por eso estoy aquí. Aunque quise negarme no pude y acepte ir con el a ese lugar que me quería mostrar. Subí al auto y nos dirigimos así ese lugar. Después de unos minutos de manejar se detuvo, me tomo de la barbilla con el dedo y me beso en la boca con ternura. Bajamos del auto había una casa preciosa enfrente y me dijo: - Esto es lo que te quería mostrar, esta en mi casa y me gustaría que la conocieras. Al entrar a la casa me dijo -¿Qué te parece? - Es muy bonita - Mariana nada me gustaría más que fueras mi esposa -No podría, papa no me permitiría casarme con alguien que no fuera rico. -Mariana eso no tiene nada que ver, en una relación lo único que importa es que los dos se amen y tu padre no tiene porque decidir con quien te vas a casar o a quien vas a amar. Fernando me abrazo fuertemente, me beso y no pude evitarlo pues yo también estaba perdidamente enamorada de el. Nos besamos por un largo rato y sin darme cuenta terminamos haciendo el amor. Me quede con él un largo rato me di cuenta de que anochecía y yo tenía que ir a la fiesta de pilar. Fernando seguía besándome, me acariciaba con gran ternura, me entregue a el por completo. -Llévame a casa, tengo un compromiso esta noche –le dije- -Que coincidencia yo también. -Tengo un compromiso con una amiga que es hija de un poderoso señor dueño de una cadena de barcos cruceros. -En uno de ellos nos conocimos. -¿Y que mas da lo nuestro fue solo una aventura? -Mientes- grito-lo nuestro fue un sentimiento muy fuerte. Y me asuste al ver que se enfadaba. Salí de prisa. Llevaba en mi el recuerdo de Fernando ese momento no lo olvidaría. Enseguida Fernando salió tras de mí y se sentó ante el volante. -Entra Mariana. Era un hombre cálido de esos que no se olvidan. Me empezó a hablar de sus sentimientos, de su amor por mí, de su necesidad de tenerme y estar a mi lado, y de huir juntos. -No digas locuras. -No es locura, Mariana. -Mi padre no estaría de acuerdo. -Tu padre quiere casarte con un millonario, no es así.
-Si, el dice que yo soy heredera de una gran fortuna y no quiere que me case con alguien rico, de lo contrario piensa que se aprovecharían de nuestros bienes que con tanto esfuerzo le ha costado tener lo que tenemos. -Lo entiendo. -¿Y qué vas a hacer? -No lo sé, hoy tengo ese compromiso al que no puedo faltar, asistiré con mi padre y mi hermana y su marido, lo que pase después no lo sé. -Tal vez ahí encuentre tu príncipe azul, alguien muy rico. -No, Fernando, mi príncipe azul lo tengo enfrente de mí solo que hay cosas que no puedo cambiar. Me abrazo con fuerza y me dejo en mi auto. Me fui llorando todo el camino, cuando llegue a casa me arregle para ir a la fiesta. En eso entro Sofía y me pregunto por los terrenos le dije que no lo había visto que me encontré con Fernando y le conté todo lo que paso. -Mariana si papa se entera se va a molestar contigo. -lo sé pero no pude evitarlo, lo amo demasiado. - Papa nunca considerara que te cases con alguien que no sea de tu clase, entiéndelo de una buena vez y no creo que quieras ocasionarle un disgusto. -no me gustaría disgustarlo pero me gustaría que entendieran que en el amor no se manda. -Tenemos que vestirnos para ir a la fiesta sino llegaremos tarde… Después de un rato de ver mi ropa, decidí que me pondría un vestido color uva que tenía desde hace algunos meses, papa me lo había regalado y no me lo había puesto, me pareció adecuado para la ocasión. Al salir de mí recamara papa me miro y dijo: -Estas hermosa hija. -Yo también se lo dije –comento Sofía-. -Pues no estaría mal… la familia tiene un hijo soltero que es ingeniero naval y tiene 30 anos. Lo conozco desde hace muchísimo tiempo y pienso que sería un buen partido para ti Mariana. -Yo solo pensaba en Fernando, ningún otro hombre me llamaba la atención por importante y rico que fuera. En eso llego Alejandro por Sofía para irnos todos juntos a la fiesta. Nos fuimos en el auto de papa, que por cierto se veía muy bien y había algo que yo siempre le había agradecido, que no se hubiera casado con alguien mas después de que murió mama. Al entrar a la fiesta Pilar salió a recibirnos nos saludo a todos y nos agradeció por haber asistido, a mi me dio un fuerte abrazo. Pilar se veía muy bonita, lucia un vestido rojo que le acomodaba muy bien a su figura. Se acercaron sus papas para saludarnos y estuvieron platicando con papa. Sofía, Alejandro y yo nos fuimos a sentar en la mesa de los padres de pilar. Se acercó Pilar y me dijo -Te voy a presentar a mi hermano, voy a ver en donde esta hace un rato que no lo veo, pero en cuanto lo encuentre te lo presentare para que lo conozcas estoy segura de que te agradara. Pilar se había ido a buscarlo y yo tome un tiempo para ir al tocador. Al salir de este, vi a Fernando platicando con mi padre no sabía porque o de donde se conocían, de pronto vi que todos estaban volteando a verme y Fernando se acerco asía mi. -Que haces aquí. - le dije- Al mismo tiempo llego Pilar y me dijo -Creo que ya se conocieron, llegue demasiado tarde. -Ustedes dos son hermanos. –pregunte muy confundida- -Si Mariana, Fernando es mi hermano. Sé todo lo que paso en tu viaje y Fernando me pidió que te invitara que no podía dejar de pensar en ti y que te amaba.
- Pero!!! -No te preocupes por nada, yo me voy para dejarlos platicar. -Fernando, porque me mentiste sobre tu verdadero origen. -Sabes, a mi no me gusta impresionar con mi dinero y si me había de ganar tu amor no sería por mis riquezas. -Sabes algo, aparte de que conozco muy bien a tu papa se que no se interpondría en nuestro amor, porque sabe que yo no te busco por interés sino por lo más importante que es el amor. No pude contestar nada estaba paralizada eran tantas sorpresas en un solo momento que no supe que decir. -No termino de entender porque me engañaste, porque no fuiste sincero conmigo desde el principio. -Mariana, Mariana nos amamos y eso es lo único que importa, tal vez me equivoque al ocultártelo pero pensé que sería mejor. -Hay muchas cosas que todavía no entiendo, la manera en cómo se ha ido presentando todo, la llamada de pilar, la fiesta y todo ha sido muy extraño. -te voy a decir cómo han ido pasando las cosas para que se te aclaren tus dudas; cuando regresamos del viaje le platique a mi hermana Pilar que te había conocido, en ese momento yo no sabía que ustedes habían sido compañeras de colegio pero al mencionar tu apellidos los cuales pude ver en la lista de pasajeros. Pilar me menciono que te conocía y yo le dije que necesitaba darte una explicación de porque me había ido así de tu lado sin haberte dicho nada. Después ella me comento que sería buena idea que te invitara a su fiesta y fue así como Pilar te llamo para platicar contigo y decidió enviarle la invitación a tu padre. Es por eso que supe mas de ti, pero créeme que si pilar no me hubiese ayudado de todas formas te hubiera encontrado porque no dejaría de buscarte hasta conseguirlo. Fuimos al jardín a tomar un poco de aire, nos miramos fijamente a los ojos, me tomo de la cintura y me beso muy apasionadamente en la boca. En eso salió papa y nos vio, pero solo me dijo; -Ese si me gusta para ti, te aseguro que él te hará muy feliz como tú te lo mereces. Me sorprendió el comentario de papa. -Yo quiero casarme con su hija, la amo y le aseguro que la voy a hacer muy feliz, claro si ella acepta. Tienes mi permiso muchacho solo falta que ella te acepte. -Creo que es muy rápido para hablar de matrimonio, no lo crees Fernando. -No Mariana no quiero pasar un segundo más sin ti. Papa se retiro sin decir nada, sé que no quiso interrumpir más en nuestra conversación. -No quiero presionarte solo quiero que sepas que estoy dispuesto a todo por ti. Esa noche me llevo él a mi casa, se despidió de mi con un tierno beso en la mejilla y quedamos de vernos para cenar al día siguiente. Esa noche pensé que sería una Sena común y corriente pero sorpresa me lleve, al ver que todo el restaurante estaba arreglado con tulipanes por todas parte, no había nadie más en ese lugar que nosotros y algunos empleado, el lo reservo para la ocasión, se acerco uno de los meseros para ofrecernos champaña y brindamos por nuestro amor, todo estaba muy tranquilo, de pronto saco de su bolsa un estuche y me pregunto ¿te gustaría casarte conmigo?; mi corazón empezó a latir rápidamente, me temblaban las piernas, me sudaban las manos….. Y le conteste: -Nada me haría más feliz que pasar el resto de mi vida junto a ti, acepto mi amor. Me abrazo con fuerza y me beso intensamente.
Estábamos muy contentos y emocionados. Después de unos días empezamos a iniciar los preparativos para la boda, nos encargamos de todos los detalles, juntos decidimos lo de los arreglos, el salón, las invitaciones; todos los preparativos para nuestra boda. Nos casaremos el día 27 de Agosto, papa estaba feliz, Sofía se había casado uno meses atrás y estaba esperando una niña. El día de la boda, la catedral de la ciudad estaba muy arreglada, había flores por doquier, yo lucia un hermoso vestido blanco y Fernando un traje muy elegante, era el novio más guapo y yo la mujer más feliz del mundo. La fiesta fue en un casino muy elegante, toda la gente se divertía y al terminar la fiesta, tomamos nuestras maletas, para irnos de luna de miel para tomar el mismo barco donde nos conocimos, quien iba a pensarlo que ahora estamos en la misma habitación como aquella noche tan especial……….. fin.
Hoy es mi ultima clase de literetaru y aunque llegue un poco tarde quiero aprovechar para decirles a todos mis compañeros que les deceo lo mejor en su vida, que en estos tres años de estar juntos aprendi muchas cosas de cada uno de ellos, agradesco a Dios por aberme permitido terminar la prepa, por cada momento que pase y por todos mis amigos. Me gustaria escribir algun mensaje para cada uno de mis compañeros pero nunca acabaria por eso solo les voy a decir que le echen muchas ganas en todo lo que agan, si estudian es lo mejor que pueden hacer, pero si deciden trabajer o alguna otra cosa nunca se den por vencidos y echenle ganas, la vida no es facil pero los amigos pueden ayudar a que lo sea y siempre recuerden que en mi tienen una amiga. LOS QUIERO MUCHO A TODOS.
16 comentarios:
COMENTARIO DEL LIBRO "JUBENTUD ENEXTASIS"
La verdad este libro me sorprendio porque desde hace un tiempo que me lo habian prestado pero no me habia dado el tiempo para leerlo y cuando usted dijo que lelleramos uno a nuestro gusto pense en leer ese y le puedo decir que de lo unico que me arrepiento es de no haberlo leido antes, me gusto muchisimo porque habla de muchas cosas muy interesantes relacionadas con nosotros los jovenes, habla mucho de de los valores del noviasgo y de lo que nos puede pasar si tenemos sexo prematrimonial porque toda la gente dice "no pasa nada es normal" pero la verdad si pasa y hay confirme y reafirme mas mis ideas sobre el sexo prematrimonial y pienso que es mejor esperar porque todo tiene su tiempo y es mejor esperar a sufrir las consecuencias.
Aventura de Amor
H
ace un par de días que termine mi relación con Emiliano, una relación que duro mas de tres anos, el era un joven serio, pasivo y muy inteligente pero no era el tipo de hombre que yo quería para mi pero no podía terminar mi relación con el porque mi padre no lo aceptaría. Emiliano era abogado economista y director de la empresa de papa. Una noche mientras cenábamos se lo confesé a papa. Llevaba tres anos paliándome con la realidad y me negaba a admitirla. Cuando Sofía mi hermana, que era doctora y novia de Alejandro Montesinos, me contaba sus relaciones intimas con él y me sentía muy mal.
Esa noche decidí dos cosas importantes en mi vida: hacer un viaje por el mar, por todo el mediterráneo y romper mi relación con Emiliano. Cuando se lo dije a el, con su cara de pasmado se quedo mirándome sin decir nada. Pero al menos, por mi parte, ya quedaba aclarada la situación y sin dudas.
Cuando papa me oyó, me miro espantado. No podía creer lo que escuchaba. -¡Mariana!- me dijo- ¿Cómo es posible que después de tres anos termines tu relación con Emiliano? –Hay cosas que no se pueden aguantar, papa. Soy joven aun, trabajo contigo y solo por el hecho de que Emiliano se el abogado, economista y director de tu empresa no puedo empeñar mi vida.
Papa conocía mi serenidad por eso me tomo de la mano, me llevo hasta la biblioteca que era un lugar muy grande y acogedor, donde podríamos hablar sin interrupción. Nos sentamos en el sillón que esta junto a la ventana y ahí me pregunto ¿porque lo dejaste? Emiliano es un hombre que representa mucho en nuestra empresa y tu no lo dejaste sin tener una razón valida, ¡verdad!
Tuve que confesarle los pormenores de su falta de interés que Emiliano tenia en todo, hasta para darme un beso. Y añadí:
Y ahora que ya lo sabes quisiera realizar un viaje por el mediterráneo en barco para aclarar y ordenar mis ideas.
Papa que siempre fue razonador me dilo con cierta pena: lo siento Mariana, lo siento muchísimo no pensé que las cosas estuvieran tan mal entre ustedes, y yo mismo te traeré el pasaje para que hagas ese viaje.
Me fui a mi cuarto y me tire en la cama. Llore toda la noche pensando en que habían pasado tres anos de mi vida desperdiciados… pero no tenía más remedio que tomar aquella decisión. Por mis amigas sabia de sus relación emocionales y sexuales… Sofía mi hermana me contaba lo suyo. Aquel fin de semana, ella y su novio Alejandro se habían ido a Escocia. Alejandro, que era el jefe de las oficinas de papa, arquitecto de profesión iba a ver unos terrenos donde querían levantar una fraccionamiento cuyo proyecto yo tenia en mente. Era la encargada de elaborarlo y pesaba hacer algo bonito. Pero al margen de todo esto quería hacer un viaje. Empecé a preparar mi equipaje y al anochecer embarque, papa me llevo asta el lugar donde estaba el barco para así comenzar mi viaje, era un barco muy grande y lujoso había mucha gente esperando para abordar. Ahí me despedí de papa y me dijo que me hacharía mucho de menos.
Iba por el pasillo y el bolso me tropezó en una de sus ranuras. Alguien venia de tras de mi y lo tomo por el aire. Me volteé para tomarlo y me sorprendí al ver un hombre joven, rubio de ojos verdes, atractivo de verdad. Vestía uniforme blanco y me dijo –no se preocupo, señorita- la acompañare hasta arriba. Me llamo Santiago.
-Soy Mariana Montero- que nombre tan bonito. Llegamos a cubierta y un marinero intento tomar el bolso, poro el le dijo: - yo la acompañare hasta su habitación. Me pidió el pasaje y yo se lo di.
-preferencia… vaya, vaya. Y tomándome del brazo con naturalidad. Me llevo por cubierta, y después me acompaño hasta mi habitación -Vendré mas tarde para saber como se encuentra, Mariana, si está a gusto…
Lo mire algo asombrada y el debió entender mi mirada porque dijo –Soy el encargado de relaciones publicas del barco. No se preocupe. Me quede sorprendida, estaba acostumbrada a ver suites de hoteles, pero nunca
había visto una en un barco. Papa era exagerado me había comprado lo mejor. Había una salita pequeña pero muy bonita era un lugar muy acogedor, en la recamara había un vestidor y un baño grande con una tina, en el cuarto había una ventana donde se podía ver hacia el mar, la recamara era muy grande y cómoda, era de verdad la mejor de las suites. Fernando me miro con curiosidad y me dijo verdad que es muy bonita la habitación. –Le dije- nunca había visto algo similar.
Me entrego el bolso de viaje y se fue pero enseguida se volteo y me dijo- saldremos dentro de pronto.
El barco navega de noche. Pronto llegaremos a palma. Si le apetece salir a dar un paseo, a comer o a conocer palma, la acompañare con mucho gusto
- gracias- le dije
Pero ni acepté ni rechace su invitación. Para mi era un desconocido.
Esa noche dormí muy mal, no estaba acostumbrada a navegar. Antes de dormir recorrí todo el barco tenia varias piscinas, salas de fiestas, restaurantes y varios comedores, con gente muy elegante aunque por mi profesión de arquitecta no me asombraba pues estaba acostumbrada a ver todo ese tipo de lujos, trabajaba en los estudios de papa y ahí veía a mucha gente acostumbrada a poseer esos lujos.
Por mi parte no me podía quejar teníamos una casa preciosa en Barcelona y Madrid teníamos oficinas en las mismas ciudades, pues trabajábamos toda la zona y mucho mas, papa se había convertido en un arquitecto muy importante y a mi me gustaba la profesión, pero necesitaba desconectarme de todo y por eso emprendí mi viaje. Cuando me levante por la mañana, luego de darme una ducha me puse un vestido rojo, usaba unas zapatillas negras de tacón muy alto y unas joyas muy hermosas que me regalo papa. Salí a cubierta, el barco ya estaba amarrado al muelle y los viajeros se disponían a conocer la ciudad. Un camarero me dijo- zarparemos hasta el anochecer, disfrute su recorrido señorita-
-si ya lo sabe todo- dijo una voz tras de mi-, solo me queda invitarla a conocer palma, si es que aun no la conoce. Me volteé y era Fernando. Llevaba pantalón gris, camisa color durazno, estaba realmente atractivo. No pensaba perderme aquella ocasión –acepto- le dije, aunque conocía palma casi de memoria, y salimos juntos.- ¿siempre trabajas en barcos? No siempre contesto, este es un barco nuevo y me contrataron para asegurarme del buen funcionamiento dentro de el. ¿Eres casada? Me pregunto desconcertándome. No, soy soltera y sin compromiso
Vaya tengo suerte…
-¿Por qué lo dices?
-por que también soy soltero y sin compromisos, lo raro es que siendo tan bella no tengas novio. Lo mire un poco maliciosa me atraía mucho, todo lo que nunca me inspiro Emiliano. Sentí miedo, pues no lo conocía y empezaba a sentir algo por el. Papa se molestaría cuando se lo contara, yo no tenia madre desde hacia mucho tiempo pues ella falleció cuando todavía era una niña pero tenia un padre que hacia la doble función y muy bien por cierto, se había encargado de no nos faltara nada, estudiamos en los mejores colegios y siempre estuvo al pendiente de nosotros. A el solía contarle todos mis problemas, lo de Emiliano se lo dije cuando no podía mas.
-te has quedado pensativa- dijo Fernando y agrego te invito a tomar un café en un lugar que esta muy cerca de aquí, en ese lugar venden los mejores cafés de la ciudad y unos pastelillos realmente deliciosos.
-esta bien – le dije y nos dirigimos hasta el lugar. Ya estando ahí nos sentamos en un lugar cerca de una ventana donde se alcanzaba a ver el parque que estaba junto a la catedral.
-eres una chica “bien”, ¿verdad?
No se a lo que tu llames “bien”.
-bueno para hacer este viaje en una suite de esa clase, no eres cualquier cosa
Cualquier cosa no soy, pero tampoco soy una niña “bien”, como tú dices, soy una arquitecta profesional. Eres muy joven para ser arquitecta, pues no aparentas más de 21.
-te equivocas, tengo 25. Acabe la carrera a los 23 y pase dos anos más en los Estados Unidos.
-ósea que sabes perfectamente el ingles.
-por supuesto. A eso fui a los Estados Unidos, a perfeccionar mi carrera y a estudiar el idioma.
Cuando nos servían el café, me dijo- me gustaría ser tu amigo, y si me lo permites te acompañare todo el viaje-¿acompañarme? ¿De que manera?
-bueno, todos los días pararemos en una ciudad y si quieres te digo el próximo itinerario, así podrás planificar todo.
-no, mejor no me lo digas, pues me gustan las sorpresas.
Al salir del café fuimos a recorrer el lugar, paseamos por el parque y visitamos la catedral. Después fuimos a comprar un par de cosas que me hacían falta. Por la noche regresamos al barco y me acompaño hasta mi suite, y quedamos de vernos un poco mas tarde en cubierta.
Luego de un rato llamaron a la puerta, debe de ser Fernando, pensé y rápido fui a abrir. Ya vestía un uniforme blanco con gorra blanca y azul.
– ¿Siempre haces ese trabajo? Le pregunte con curiosidad.
-no, no suelo hacerlo. Este viaje es pura casualidad porque el barco es nuevo y los dueños me pidieron que vigilara como se trata al pasajero.
Eres empleado de la compañía…
-Algo así. Me llaman cuando me necesitan y yo acudo.
Ya era muy tarde y le pedí que me acompañara hasta mi suite. Esa noche dormí pensando en Fernando, pero habíamos quedado de ir a cenar a la mesa del capitán la noche siguiente, era una invitación que se le hacia a pocos pasajeros.
A la noche siguiente yo vestía un traje negro escotado y sin mangas. Hacia mucho calor y eso que la brisa del mar la contrarrestaba un poco. Fernando me esperaba en la puerta de la suite. El vestía un traje negro y camisa azul, lucia muy bien, pues se veía muy atractivo.
Fernando me estaba causando una serie de emociones que me confundían todavía más, pues tenía miedo y a la vez ansiedad. Había tenido una relación blanca con Emiliano. Sus besos era simples, y no podía hablar de caricias masculinas, porque no las había tenido, Emiliano era tan tímido y respetuoso, que me trataba como si yo fuera una estatua y era una mujer con nervios, deseos, emociones y ansiedades, como cualquier ser humano. Fernando tenia algo que me atraía de un modo alarmante, incluso quise decir que no iría a cenar con el, que invitara a cualquier otra persona a la mesa del capitán, pero me fue imposible, no tuve el valor. Me sujeto del brazo y me llevo hasta el comedor donde me presento al personal. Todos fueron muy amables y Fernando mas que nadie. Empezaba a tener con el una complicidad extraña que me atraía y me daba miedo ala vez.
Luego de un rato comenzó la orquesta y me invito a bailar, y acepte un poco nerviosa. Me sujetó por la cintura, me apretó contra su cuerpo y bailo un bolero despacio de una manera muy sensual.
“estoy perdida”, pensé. “me estoy enamorando de este hombre y no se quien es. Papa me mataría cuando lo sepa” que Emiliano no fuera mi hombre no significa que otro tampoco lo fuera. Baile pegado a el. No se cuanto cerré los ojo y Fernando me dijo una palabras bellas al oído. Me di cuenta de que me estaba conquistando y cuando me llevo al camarote, ya casi amaneciendo, me miro bajo la lámpara que iluminaba mi puerta. – si me dejas te daré un beso
-!por favor Fernando!
-por favor Mariana…
Y doblándome por la cintura me busco la boca. Me beso un buen rato. Jamás había sentido una cosa semejante, las mariposas empezaban a recorrer mi cuerpo y pensé en Emiliano. Tantas veces que pudo besarme así y nunca lo hizo.
-Perdóname- dijo el después -. No pude evitarlo.
No pude decir palabras, agite la mano y entre a mi camarote. Me fui al baño, me desvestí y me di una ducha. Luego me puse el camisón, termine llorando aunque no se porque lo hacia, y apreté mi boca contra la almohada y así me dormí. Por la mañana, al despertar me invadían los recuerdos de aquel dulce beso, pues no podía dejar de pensar en lo sucedido la noche anterior. Salí de la cama para vestirme, me puse un lindo short y una blusa blanca, me sujete el cabello y así salí de mi camarote.
Lo encontré enseguida y al verme me dijo – hoy visitaremos Florencia, pasaremos un día maravilloso, si tu me permites te mostrare algunos lugares de interés. ¿Me acompañas?
--¡Esta bien! Le conteste enseguida.
Al llegar al muelle me dijo – alquile un automóvil para hacer nuestro recorrido del día de hoy.
Subí con el al auto, era un coche muy bonito para ser de un empleado pues el alquiler debió de costarle mucho dinero. ¿Puedes salir así, sin avisar a nadie o pedir algún permiso? –le pregunte-
-porque no soy un empleado de tierra. Puedo hacer lo que quiera. Solo estoy de inspección. Vamos que se nos hace tarde, mejor cuéntame algo de ti.
- No tengo nada que contar. ¿Y tú que me cuentas de tu vida?
-La mía es simple. Soy ingeniero naval y abogado. Y pase un largo tiempo en los Estados Unidos.
O sea, que era un tipo pudiente, o al menos lo era su familia. Pensé que le agradaría a papa pero solo dije –tuve un novio durante tres anos. El es abogado y economista – y no dije nada mas porque tendría que explicar quien era yo y no quería.
-¿terminaron o sigues con el?
- Lo deje. Por eso decidí hacer este viaje, para compensar mi pena y aclarar mis ideas.
-vaya, vaya ¿y lo amabas mucho?
Lo preguntaba con un tono íntimo y malicioso e insinuante.
No respondí. Llegamos a Florencia y nos dirigimos a un restaurante para desayunar hay seguimos nuestra conversación.
-¿Por qué duraste tanto con el si no lo amabas?
-No lo se. Tal vez no quería reconocerlo. Mejor háblame de ti.
-jamás he tenido una novia formal.
Después de desayunar fuimos a varios lugares la ciudad era hermosa si de por mi fuera me hubiera quedado toda la semana en ese lugar.
A media tarde fuimos a llevar el automóvil en el muelle y entramos al barco y no supe quien se haría cargo del auto. Aquella noche no quise ir a cenar al lujoso restaurante. Me quede en cubierta sola, pues prefería pensar. Mas tarde subí a mi habitación para descansar y dormir un poco.
A la día siguiente estaríamos en Nápoles, pero no quería salir ese día solo quería pensar y preferiría pasar el día en el barco. De pronto sonó el teléfono, era el, le dije que estaba cansada y que prefería quedarme a descansar
-Me gusta mi relación contigo, me gusta mucho- me dijo Va a ser muy difícil olvidarte, ¿sabes?
Gracias. Colgué el teléfono y me acosté. Fernando para mi ya no era cualquier, era una persona que me atraía bastante, de un modo casi brutal, por eso soñé con el, y cuando desperté por la mañana, me vestí rápidamente y me baje del barco para que el no pudiera verme. Recorrí Nápoles yo sola, con cierta nostalgia, Ir sola no me complacía pero así pude pensar mejor y visitar algunos museos. Al atardecer entre al barco, lo primero que vi fue a Fernando.
-Vaya - me dijo -¿Por qué huiste?
- Claro que no hui- le conteste enseguida
-No lo niegues, no esta bien en ti. Considero que eres una persona educada y, sobre todo, segura de ti misma. ¿Qué temes Mariana?
-Nada, Fernando, estas equivocado.
-¿Aceptas una cerveza en el bar?
-Esta bien pero solo una, de acuerdo.
- Claro será como tú digas.
Nos sentamos en una mesa mirando hacia el mar y ya empezaba a anochecer.
-Me gustaría que esta noche bailáramos juntos.
-No. prefiero bañarme, hace mucho calor y me quedare en la piscina.
-De acuerdo, estaré a tu lado.
-Pero Fernando….
-Por favor Mariana… contéstame algo ¿amaste a ese novio con pasión?
-No. Pensé que estaba enamorada de Emiliano, pero poco a poco fui entendiendo que no era mi hombre.
- ¿Y como tiene que ser tu hombre?
-Fiel, atractivo, cariñoso, comprensivo y apasionado entre algunas otras cosas más, y lo más importante que no tenga más mujer que yo.
-Que curioso, coincidimos en todo, yo busco eso, una mujer leal, apasionada que me ame con toda la pasión y emoción que implica el amor.
Me sentí aturdida y desvié mis ojos de aquellos verdes tan llamativos. Yo también los tenía verdes. Era esbelta, de piernas largas y cintura breve, caderas grandes y cabello largo. Papa siempre me decía que era muy atractiva. Papa nunca me dejaba salir con Emiliano un día entero, en cambio a Sofía, mi hermana, la dejaba salir los fines de semana con Alejandro y papa no se preocupaba. Cuando hacia el comentario con mi hermana, Sofía solía decirme:
-Papa sabe que no estas enamorada. En cambio conoce perfectamente mi amor por Alejandro.
Papa era muy escrupuloso conmigo y libre con Sofía…Esta pensando casarse a finales de ano y me contaba todo lo que hacia con su novio, todo lo que yo nunca hice con Emiliano…. A cualquiera que le dijera que a mis veinticinco anos era virgen se hubiera reído de mi y por eso no se lo dije a Fernando.
-Es raro que no tengas novia- le dije aquel día ya cerca de la piscina-
-¿Por qué lo dices?
-Porque eres un hombre muy especial. Tienes un ego que puede enamorar…
-¿Te enamoraría?
-No lo se, prefiero no pensarlo.
-Pues me gustas de tal manera, que pienso en ti constantemente cuando no estoy a tu lado.
Le conteste. Me tire a la piscina y nade de lado a lado. Vi como se tiraba Fernando. A grandes brazadas vino junto a mí. Me escurrí hacia la escalera y nos sentamos en cubierta y el me pregunto -¿Por qué dejaste a Emiliano?
Ya hablaba de Emiliano como si lo conociera de toda la vida…
Esa noche yo necesitaba desahogarme un poco. Mi amistad con Fernando era ya un hecho. Me había enamorado de el, y como mujer con el sexto sentido que tenemos todas, yo sabia que Fernando se había enamorado de mi. ¿Adonde llegaría aquella relación? ¡Yo que sabía! Pero nunca olvidaría aquel crucero. Íbamos directos a Cerdeña y después regresaríamos a Barcelona sin detenernos. Se terminaba el viaje, la relación y posiblemente aquella hermosa amistas. Por eso, cuando aquella noche, bajo la luna y un
poco mas lejos de la luz que iluminaba la puerta de mi camarote, me pregunto porque había dejado a Emiliano, se lo dije:
-Emiliano es el mejor ayudante de mi padre, para este hubiese sido perfecto que me casara con el.
-¿y tu madre que opina?
-mama falleció hace mucho tiempo, apenas la recuerdo pero mi padre, afortunadamente, no volvió a casarse. Tengo una hermana que es medica y se casara pronto con el gerente de la empresa de mi padre, que es también arquitecto, como yo, empecé con Emiliano hace unos anos, el primer ano fue un juego de niños, de jovencitos, íbamos a bailas teníamos muchos amigos y solíamos salir con ellos y no me di cuente de que no era amor, era amistad.
-¿y cuando te percataste de que no era amor lo que sentías por el?
-no lo se. Empecé a pensarlo un día al escuchar las relaciones de mis amigas y de Sofía mi hermana, y supe que lo mío no era lo que ellas me contaban.
-o sea, que era un hombre pasivo, totalmente culto, respetuoso pero no había pación en nuestra relación.
-no te emociono.
-no, por eso un día leí un folleto de estos cruceros y decidí embarcar, pero antes hable con mi padre y le conté todo. Emiliano, como te dije, es muy amable, inteligente, pero la mujer para el no existe… es un hombre apagado.
- ya entiendo, tu necesitas fuerza, amor, pasión… ¿no es eso?
-si. No todos lo hombre sirven para todas la mujeres. Estoy seguro de que Emiliano encontrara a una mujer a quien hacer feliz, pero no a mí. Y eso es todo no hubo nada mas.
-¿y como acepto tu rompimiento?
-no dijo nada, como siempre. Emiliano suele aceptar todo con pasividad.
-me asombras.
-¿Por qué?
-por que eres una mujer palpitante, viva, necesitas que te amen. Tu posesión es un regalo… ¿pasarías esta noche con migo, mariana?
-claro que no
¿Escrúpulos? Yo te deseo y tu a mi ¿Por qué no pasar la noche juntos? ¿Por qué no darnos ese gusto?
-no
-de acuerdo, de acuerdo, no insistiré. Nunca lo hago un una mujer; sino quieres, lo dejamos y tan amigos.
-es raro que te conformes
-si, es raro, pero a ti te respeto de un modo especial. Y no se porque. Te conocí de una manera curiosa y original. Continúe contigo, te lleve a tierra y regrese abordo a tu lado. Pero si me dices que no, pues se acabo el asunto, no por eso voy a dejar de admirarte y desearte.
Se levantaba
-buenas noches mariana.
-buenas noches.
Entre en mi camarote y quede pegada a la puerta pensando si había hecho bien o mal. Pensé que había hecho bien. A la mañana siguiente, cuando Salí, lo encontré junto al barandal del barco.
-estoy dispuesto a recorrer Cerdeña con tigo por que el viaje se acabo. Al regreso no iremos directo a Barcelona. La pasamos todo el día juntos, recorrimos museos y algunas tiendas, por la tarde comimos un helado y nos sentamos en una banda que estaba en un jardín rodeada con flores, en todo
el camino no me hablo de amor, me fue contando lo que veía. Yo ya conocía serena pero no dije nada. Al atardecer, regresamos al barco.
-esta noche- me dijo antes de despedirse- te invito e cenar en el comedor. Bailaremos un rato. ¿Te apetece?
Claro que si. -le dije-.
tenia varios vestidos de fiesta, pero aquel negro escotado y abierto por detrás, apretado hasta la cintura y con vuelo hasta el suelo, me quedaba muy bien, puse en mis pies unos guaraches plateados y después de maquillarme un poco, Salí del camarote, allí estaba Fernando esperándome, con un traje muy elegante.
-¿sabes? – me dijo-. Tu boca invita al beso, mariana.
-¿Qué?
-lo que he dicho. No te boy a negar que conozco bien a las mujeres y tu eres de esas que no se olvidan.
Conmovida y ruborizada, me dirigí con el al comedor. La orquesta ya tocaba. El me llevo a cenar a la mesa del capitán, ya los conocía a todos. Después de servir el postre me invito a bailar y yo acepte. Fernando me hablaba al oído me decía cualquier cosa, pero su boca cerca de mi oreja me estremecía. Estábamos emocionados. Bailamos hasta muy tarde, cuando nos íbamos a retirar Fernando me llevo de la mano hasta el camarote y allí se detuvo. Me tomo con sus manos envolviéndolas en mi cintura y me beso con suavidad la mejilla que se ruborizaba al compas de su boca, después me beso en la boca y le correspondí con un beso muy calido y mis manos alrededor de su cuello. Nos besamos por un largo tiempo sus manos recorrían todo mi cuerpo y entramos a la habitación, ya no pude negarme, nos deseábamos, y poco a poco le fui desabrochando cada uno de los botones de su camisa con mis suaves manos, al mismo tiempo desvaneció el vestido de mi cuerpo, nos recostamos sobre la cama, nos besamos y acariciamos, éramos uno mismo en ese momento, nada mas importaba, solo nuestro amor.
Me dijo lo mucho que me amaba y lo mucho que le gustaba desde que me vio entrar por primera vez al barco. Me dormía cuando amanecía. Al despertar, pensé que había sonado. Pues el no estaba con migo y el barco ya estaba en Barcelona. “!dios mío!”, pensé. “mi padre vendrá a buscarme. Estará en el muelle y yo tendré que bajar con Fernando”. Pero me equivoque, Fernando no estaba por ninguna parte.
-¡dios santo, se había ido así, sin decirme ni una palabra! ¿Cómo era posible? Yo tenia de el un concepto elevado y me había dejado después de haberme poseído. Me sentía muy mal. Salí de la cama y me vestí para ir con mi padre que ya me esperaba. Cuando vi a mi padre, baje corriendo y llore en si pecho. Papa me dijo.- ¿Qué ocurre? ¿Qué te han hecho?
-solo es la emoción de mirarte.
Papa no respondió, me ayudo a meter el equipaje en el automóvil y arranco. En el camino me dijo
-no se llora por nada, mariana, tu llanto indica un dolor grande o una decepción, no soy tonto.
-te digo que no, papa.
-ya me lo contaras estoy seguro de que lo aras.
Mi dolor era doble, por lo feliz que había sido y por la manera que había dejado. Fernando me había abandonado como si yo fuera un saco y yo era un ser humano. Sofía me recibió con los brazos abiertos y enseguida me dijo:
-algo te a ocurrido.
Me acompaño a la habitación iba ablándame de los terrenos que había comprado nuestro padre.
-es un terreno maravilloso. A Alejandro le encanto y papa ya hiso el contrato.
-me pondré a trabajar – dije-.
Pero mi vos temblaba. Sofía me empujo asía la alcoba y me tiro al sofá, me miro bien a los ojos y alzándome el rostro con las dos manos me dijo
-¿Qué te paso? Papa me conto lo de Emiliano. Eso no me asombra, lo que me llama la atención es tu semblante.
-conocí a un hombre.
-¿lo vez? Y te ha enamorado. Estabas tan falta de amor
- no es eso, Sofía, no es eso.
-¿entonces que es?
-ayer me acosté con el.
-¿y bueno?
-que no lo encontré por la mañana. Subí al auto con papa y no lo vi más.
-ya lo veras, no concibo que un hombre se haya acostado con tigo, te haya conocido y te haya dejado por las buenas no te preocupes ya veras que aparece.
-no se lo cuentes a Alejandro por favor me da vergüenza.
-eso no tiene que dar vergüenza es la vida misma y no hay nada de que avergonzarte.
Tal vez Sofía tenía razón pero yo no razonaba. Solo tenia en mi corazón que había sido burlada, había sido convencida para fallar y no estaba dispuesta a perdonar. Venia cansada me di una ducha y me acosté.
-ya veras que vuelve me dijo Sofía y me pregunto si lo conocía de antes
-no lo conocí en el barco. Era sencillo pero tenía clase un joven especial.
-ya aparecerá-
Dormí sonando con el. Así viví una semana incluso empecé el proyecto de la organización. Una tarde tuve una llamada extraña. Era una compañera de colegio, pilar, pero no recordaba el apellido. Pilar había sido mi compañera en un colegio ingles. Me dijo que le gustaría verme, mi asombro fue mayor, por que no se encontraba entre las amigas de mi grupo, pero no podía despreciar a una persona que había conocido antes y quería verme.
-¿nos vemos en una cafetería? Me dijo pilar
-claro, pero… ¿ocurrió algo importante?
-no. Solo quiero hablar contigo. Te llame hace unos días y Sofía me dijo que estabas viajando por el mediterráneo y quiero que me cuentes tus experiencias por que me gustaría ir a uno de esos viajes.
Quede citada con ella al día siguiente. En eso, papa asomo por la puesta de mi despacho y me mostro una tarjeta. Era una invitación de cumpleaños de una amiga mía.
-es de pilar.
-si. Y al mismo tiempo me confeso que sus padres era personas muy importantes y de mucho dinero. Son dueños de una compañía de cruceros muy importante.
-¿será de esa compañía el barco donde fui de viaje?
-si. Nuestra empresa ha construido algunas casas para ellos.
-Allí vive gente muy importante, como mínimo tienen doce barcos y celebran el cumpleaños de su hija Pilar con una gran fiesta.
-Pues me quede de ver con ella mañana en un café, dijo que quería hablar conmigo.
-Me parece bien, nos invito a todos a su fiesta pero te contare después con más detalles hija porque tengo que salir en este momento a ver lo de un terreno.
Al día siguiente fui a buscar a Pilar al lugar donde quedamos de vernos era un café muy grande y bonito, al entrar la reconocí inmediatamente, pues no es fácil olvidar a una persona tan inteligente, recuerdo que siempre estaba entre los primeros lugares.
Rápidamente se levanto de su lugar y se acerco para saludarme.
-Hola Mariana te acuerdas de mí
- claro te reconocí desde que entre, pero dime como has estado
-Muy bien, hace un tiempo que me case y soy la mujer mas feliz del mundo, tengo un marido único. Pero dime tu que as hecho, me entere que andabas con Emiliano, ¿te casaste con el?
- No, terminamos hace algunos días, por eso realice mi viaje para despejarme un poco.
- Que bueno que lo mencionas cuéntame de tu viaje.
-No hay mucho que contar solo fueron unos días.
Después de platicar un rato sobre cosas sin importancia nos despedimos. De regreso a casa pensé quienes eran sus padres, papa había dicho que tenían una compañía de barcos y no entendía porque Pilar me pedía consejos para realizar ella un viaje siendo que esa información ella la sabía de sobra. Cuando estábamos en el café Pilar menciono que tenia un hermano ingeniero como ella y no se porque pero eso me inquieto un poco.
Ya en casa Sofía se acerco y me abrazo porque me veía triste y me dijo-Mariana lo que paso en el barco no tiene importancia, no tienes porque sentirte tan mal.
-Tal vez para ti no tenga importancia pero para mi si, fue mi primera vez y no tengo experiencia, todo lo aprendí esa noche con el fu lo mejor que me ha pasado pero lo que me tiene tan mal es que el se fue y me dejo sin haber dicho nada eso es lo que mas me duele y me confunde, me siento como un trapo usado ¿y sabes que es lo peor?
¿Qué?
-Que me enamore profundamente de el y el ya no esta.
-¿y que hacia el en el barco?
-el era el encargado de relaciones publicas de la compañía.
-mariana, papa no te permitiría que te casas con un don nadie
-no era un don nadie, Sofía, es curioso pero el actuaba como un verdadero señor de clase y no como un don nadie como tu dices.
-pero se acostó contigo y huyó y eso no es de un caballero.
-tal vez es un castigo por lo que le hice a Emiliano
- a Emiliano no le afecta mucho, lo he visto con la secretaria de papa dos o tres veces
En esa tarde papa entro a mi despacho, me dijo que Sofía le había comentado de lo sucedido con Fernando en el barco y también le hablo de su empleo en este mismo.
A papa no le parecía que yo estuviera interesada en un joven de otro nivel social. Fueron pasando los días y la fiesta se acercaba. Un día fui a ver los terrenos que había comprado papa para empezar a trabar en mi proyecto, me sentía muy triste porque para mi no importaba que Fernando fuera un simple empleado, yo lo amaba. Ese día en la noche era la fiesta de Pilar y no tenia ánimos de asistir. Al llegar al lugar donde iba atrabajar vi un carro estacionado, era muy lujoso de los más caros que podría haber, pero no le tome mucha importancia. AL bajarme de mi coche vi que alguien se acercaba asía mi, era Fernando, me quede sin aliento pues no esperaba encontrarlo en ese lugar.
-Hola Mariana.- me dijo.
-¿Qué haces tu aquí?
-Sabía que te encontraría por aquí.
- ¿Cómo lo supiste?
- ese es mi secreto tengo algunos contactos.
-¿Por qué te fuiste sin decir nada?
-No quise ofenderte o hacerte sentir mal, por eso me fui antes de que despertaras pero quiero que sepas que te amo y llevo grabado en mi mente
tu recuerdo. Mariana quiero que sepas que eres el tipo de mujer que había estado buscando y ahora que te encontré no quiero perderte quiero pasar el resto de mi vida contigo.
No supe que decir me di cuenta de que el no me había usado como yo pensaba, me sentía tan confundida pero dentro de mi tenia una tranquilidad al escuchar sus palabras, yo también lo amaba.
-Sube a mi auto y te llevare a que conozcas un lugar que se que te encantara.
-No puedo tengo una compromiso para mas tarde y no quiero que se me haga tarde.
-Por favor, no nos tardaremos mucho.
-No Fernando no creo que sea correcto.
-Mariana yo te amo. Créeme que si te deje fue porque pensé que seria lo mejor en ese momento pero te buscaría después y por eso estoy aquí.
Aunque quise negarme no pude y acepte ir con el a ese lugar que me quería mostrar. Subí al auto y nos dirigimos así ese lugar. Después de unos minutos de manejar se detuvo, me tomo de la barbilla con el dedo y me beso en la boca con ternura. Bajamos del auto había una casa preciosa enfrente y me dijo:
- Esto es lo que te quería mostrar, esta en mi casa y me gustaría que la conocieras.
Al entrar a la casa me dijo
-¿Qué te parece?
- Es muy bonita
- Mariana nada me gustaría más que fueras mi esposa
-No podría, papa no me permitiría casarme con alguien que no fuera rico.
-Mariana eso no tiene nada que ver, en una relación lo único que importa es que los dos se amen y tu padre no tiene porque decidir con quien te vas a casar o a quien vas a amar.
Fernando me abrazo fuertemente, me beso y no pude evitarlo pues yo también estaba perdidamente enamorada de el. Nos besamos por un largo rato y sin darme cuenta terminamos haciendo el amor.
Me quede con él un largo rato me di cuenta de que anochecía y yo tenía que ir a la fiesta de pilar. Fernando seguía besándome, me acariciaba con gran ternura, me entregue a el por completo.
-Llévame a casa, tengo un compromiso esta noche –le dije-
-Que coincidencia yo también.
-Tengo un compromiso con una amiga que es hija de un poderoso señor dueño de una cadena de barcos cruceros.
-En uno de ellos nos conocimos.
-¿Y que mas da lo nuestro fue solo una aventura?
-Mientes- grito-lo nuestro fue un sentimiento muy fuerte.
Y me asuste al ver que se enfadaba. Salí de prisa. Llevaba en mi el recuerdo de Fernando ese momento no lo olvidaría. Enseguida Fernando salió tras de mí y se sentó ante el volante.
-Entra Mariana.
Era un hombre cálido de esos que no se olvidan. Me empezó a hablar de sus sentimientos, de su amor por mí, de su necesidad de tenerme y estar a mi lado, y de huir juntos.
-No digas locuras.
-No es locura, Mariana.
-Mi padre no estaría de acuerdo.
-Tu padre quiere casarte con un millonario, no es así.
-Si, el dice que yo soy heredera de una gran fortuna y no quiere que me case con alguien rico, de lo contrario piensa que se aprovecharían de nuestros bienes que con tanto esfuerzo le ha costado tener lo que tenemos.
-Lo entiendo.
-¿Y qué vas a hacer?
-No lo sé, hoy tengo ese compromiso al que no puedo faltar, asistiré con mi padre y mi hermana y su marido, lo que pase después no lo sé.
-Tal vez ahí encuentre tu príncipe azul, alguien muy rico.
-No, Fernando, mi príncipe azul lo tengo enfrente de mí solo que hay cosas que no puedo cambiar.
Me abrazo con fuerza y me dejo en mi auto. Me fui llorando todo el camino, cuando llegue a casa me arregle para ir a la fiesta. En eso entro Sofía y me pregunto por los terrenos le dije que no lo había visto que me encontré con Fernando y le conté todo lo que paso.
-Mariana si papa se entera se va a molestar contigo.
-lo sé pero no pude evitarlo, lo amo demasiado.
- Papa nunca considerara que te cases con alguien que no sea de tu clase, entiéndelo de una buena vez y no creo que quieras ocasionarle un disgusto.
-no me gustaría disgustarlo pero me gustaría que entendieran que en el amor no se manda.
-Tenemos que vestirnos para ir a la fiesta sino llegaremos tarde…
Después de un rato de ver mi ropa, decidí que me pondría un vestido color uva que tenía desde hace algunos meses, papa me lo había regalado y no me lo había puesto, me pareció adecuado para la ocasión.
Al salir de mí recamara papa me miro y dijo:
-Estas hermosa hija.
-Yo también se lo dije –comento Sofía-.
-Pues no estaría mal… la familia tiene un hijo soltero que es ingeniero naval y tiene 30 anos. Lo conozco desde hace muchísimo tiempo y pienso que sería un buen partido para ti Mariana.
-Yo solo pensaba en Fernando, ningún otro hombre me llamaba la atención por importante y rico que fuera.
En eso llego Alejandro por Sofía para irnos todos juntos a la fiesta. Nos fuimos en el auto de papa, que por cierto se veía muy bien y había algo que yo siempre le había agradecido, que no se hubiera casado con alguien mas después de que murió mama.
Al entrar a la fiesta Pilar salió a recibirnos nos saludo a todos y nos agradeció por haber asistido, a mi me dio un fuerte abrazo. Pilar se veía muy bonita, lucia un vestido rojo que le acomodaba muy bien a su figura. Se acercaron sus papas para saludarnos y estuvieron platicando con papa.
Sofía, Alejandro y yo nos fuimos a sentar en la mesa de los padres de pilar. Se acercó Pilar y me dijo
-Te voy a presentar a mi hermano, voy a ver en donde esta hace un rato que no lo veo, pero en cuanto lo encuentre te lo presentare para que lo conozcas estoy segura de que te agradara.
Pilar se había ido a buscarlo y yo tome un tiempo para ir al tocador. Al salir de este, vi a Fernando platicando con mi padre no sabía porque o de donde se conocían, de pronto vi que todos estaban volteando a verme y Fernando se acerco asía mi.
-Que haces aquí. - le dije-
Al mismo tiempo llego Pilar y me dijo
-Creo que ya se conocieron, llegue demasiado tarde.
-Ustedes dos son hermanos. –pregunte muy confundida-
-Si Mariana, Fernando es mi hermano. Sé todo lo que paso en tu viaje y Fernando me pidió que te invitara que no podía dejar de pensar en ti y que te amaba.
- Pero!!!
-No te preocupes por nada, yo me voy para dejarlos platicar.
-Fernando, porque me mentiste sobre tu verdadero origen.
-Sabes, a mi no me gusta impresionar con mi dinero y si me había de ganar tu amor no sería por mis riquezas.
-Sabes algo, aparte de que conozco muy bien a tu papa se que no se interpondría en nuestro amor, porque sabe que yo no te busco por interés sino por lo más importante que es el amor.
No pude contestar nada estaba paralizada eran tantas sorpresas en un solo momento que no supe que decir.
-No termino de entender porque me engañaste, porque no fuiste sincero conmigo desde el principio.
-Mariana, Mariana nos amamos y eso es lo único que importa, tal vez me equivoque al ocultártelo pero pensé que sería mejor.
-Hay muchas cosas que todavía no entiendo, la manera en cómo se ha ido presentando todo, la llamada de pilar, la fiesta y todo ha sido muy extraño.
-te voy a decir cómo han ido pasando las cosas para que se te aclaren tus dudas; cuando regresamos del viaje le platique a mi hermana Pilar que te había conocido, en ese momento yo no sabía que ustedes habían sido compañeras de colegio pero al mencionar tu apellidos los cuales pude ver en la lista de pasajeros. Pilar me menciono que te conocía y yo le dije que necesitaba darte una explicación de porque me había ido así de tu lado sin haberte dicho nada. Después ella me comento que sería buena idea que te invitara a su fiesta y fue así como Pilar te llamo para platicar contigo y decidió enviarle la invitación a tu padre. Es por eso que supe mas de ti, pero créeme que si pilar no me hubiese ayudado de todas formas te hubiera encontrado porque no dejaría de buscarte hasta conseguirlo.
Fuimos al jardín a tomar un poco de aire, nos miramos fijamente a los ojos, me tomo de la cintura y me beso muy apasionadamente en la boca.
En eso salió papa y nos vio, pero solo me dijo;
-Ese si me gusta para ti, te aseguro que él te hará muy feliz como tú te lo mereces.
Me sorprendió el comentario de papa.
-Yo quiero casarme con su hija, la amo y le aseguro que la voy a hacer muy feliz, claro si ella acepta.
Tienes mi permiso muchacho solo falta que ella te acepte.
-Creo que es muy rápido para hablar de matrimonio, no lo crees Fernando.
-No Mariana no quiero pasar un segundo más sin ti.
Papa se retiro sin decir nada, sé que no quiso interrumpir más en nuestra conversación.
-No quiero presionarte solo quiero que sepas que estoy dispuesto a todo por ti.
Esa noche me llevo él a mi casa, se despidió de mi con un tierno beso en la mejilla y quedamos de vernos para cenar al día siguiente.
Esa noche pensé que sería una Sena común y corriente pero sorpresa me lleve, al ver que todo el restaurante estaba arreglado con tulipanes por todas parte, no había nadie más en ese lugar que nosotros y algunos empleado, el lo reservo para la ocasión, se acerco uno de los meseros para ofrecernos champaña y brindamos por nuestro amor, todo estaba muy tranquilo, de pronto saco de su bolsa un estuche y me pregunto ¿te gustaría casarte conmigo?; mi corazón empezó a latir rápidamente, me temblaban las piernas, me sudaban las manos…..
Y le conteste:
-Nada me haría más feliz que pasar el resto de mi vida junto a ti, acepto mi amor.
Me abrazo con fuerza y me beso intensamente.
Estábamos muy contentos y emocionados. Después de unos días empezamos a iniciar los preparativos para la boda, nos encargamos de todos los detalles, juntos decidimos lo de los arreglos, el salón, las invitaciones; todos los preparativos para nuestra boda.
Nos casaremos el día 27 de Agosto, papa estaba feliz, Sofía se había casado uno meses atrás y estaba esperando una niña.
El día de la boda, la catedral de la ciudad estaba muy arreglada, había flores por doquier, yo lucia un hermoso vestido blanco y Fernando un traje muy elegante, era el novio más guapo y yo la mujer más feliz del mundo. La fiesta fue en un casino muy elegante, toda la gente se divertía y al terminar la fiesta, tomamos nuestras maletas, para irnos de luna de miel para tomar el mismo barco donde nos conocimos, quien iba a pensarlo que ahora estamos en la misma habitación como aquella noche tan especial………..
fin.
karen griselda rodriguez patiño
Actividad del martes
Hoy es mi ultima clase de literetaru y aunque llegue un poco tarde quiero aprovechar para decirles a todos mis compañeros que les deceo lo mejor en su vida, que en estos tres años de estar juntos aprendi muchas cosas de cada uno de ellos, agradesco a Dios por aberme permitido terminar la prepa, por cada momento que pase y por todos mis amigos.
Me gustaria escribir algun mensaje para cada uno de mis compañeros pero nunca acabaria por eso solo les voy a decir que le echen muchas ganas en todo lo que agan, si estudian es lo mejor que pueden hacer, pero si deciden trabajer o alguna otra cosa nunca se den por vencidos y echenle ganas, la vida no es facil pero los amigos pueden ayudar a que lo sea y siempre recuerden que en mi tienen una amiga. LOS QUIERO MUCHO A TODOS.
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